VOLVIENDO A LLOVER…5/3/2013

VOLVIENDO A LLOVER…5/3/2013

Volviendo a llover, en uno de esos días grises, cercanos a la primavera iniciando un mes de marzo, que puede estar lleno de agradables acontecimientos, como un San José, Día del Padre, unas vacaciones de Semana Santa, anhelando un reencuentro que se producirá cuando menos se espere en la mente enamorada y sin reaccionar durante años y tiempo, sonriendo, motivando, nunca dar nada por perdido, porque perdido no hay nada, solamente observar lo positivo que nos va y nos puede acontecer en la vida, en esta vida de un siglo XXI, que nos toca por vivir, imaginando esa felicidad la ansiada crisis queriendo que desaparezca con el tiempo y volvamos a resurgir de las cenizas, cuando vemos por televisión, personajes y personas que se van de este mundo y que en su día, fueron imprescindibles en el cine o teatro, y ya no están, nos podemos dar cuenta de que es importante que sepamos vivir ese momento maravilloso que nos puede brindar la vida y no lo podemos perder ni pasar de largo, cuando esta mañana escuché si hay que tener sexo en la primera cita, había diferentes opiniones, pero una que se ha quedado en mi pensamiento es, que cada uno haga lo que le pida el cuerpo o los sentimientos, y la persona siempre piensa en los demás en el que dirán, y estamos equivocados, debemos ser fiel a nuestros principios y olvidarnos de la gente, siempre te van ha criticar hagas lo que hagas, nunca se puede decir de esta agua no vas a beber, y debemos de lanzarnos a la piscina aunque sea sin red, y no estar siempre arrepentidos de no haber dado ese paso, yo comencé a vivir una historia, lo tiré todo por la borda, he caminado en soledad, viendo la mano del amor, y yo mirando hacia otro lado, hoy me siento mal y sola por mi culpa y mi falta de reacción, si cuando fue el momento lo hubiera vivido hoy sería la mujer más feliz del mundo, ya sabemos que nunca hay que dar nada por perdido, pero me tiene que quedar clara una cosa y es que las oportunidades no suelen venir a cada paso que damos y el tren solamente suele pasar una vez en la vida, volviendo a llover, volviendo a ser nosotros mismos en la próxima primavera de nuestra vida, que anhelamos sea la más inolvidable…