Querida mamá, hoy es tu día, el día de la Madre, esa palabra tan bonita, que dice tantas cosas, tu hace casi treinta y tres años que ya no estás a mi lado, pero te llevo cada momento de mi vida, en la profundidad de mi alma, y en lo más íntimo de mi corazón, está carta como cada año en este primero de mayo, te la envío a tu cielo particular, sé que desde dónde estás junto a papá, me observas, ves mis cambios del día a día, mis caídas, mis levantadas, mi luz, y mi horizonte, los dos os habéis convertido en mis ángeles de la Guarda, y que desde esa divinidad seguís mis pasos, mi huella, y mi destino, en esta nueva etapa de mi vida, que me toca por vivir, soy más yo, se muy bien hacía donde quiero ir, no miro atrás, ya, miro este presente, me siento más segura de mi misma, hago lo que me hace sentir muy bien, estoy inmersa en mis proyectos, en mis metas, en mi teatro, con ese grupo de teatro tan maravilloso, con esos compañeros y ese director que me hacen sentir tan sumamente maravillada, porque ya sabes, mamá que el teatro ha sido mi pasión, lo que ha cambiado mi alrededor, y esto es lo que me hace sentir, como me siento, cada día me siento más segura, de todo, tu tienes mucho que ver, porque eres esa voz de la conciencia, que siempre me acompaña, en este día, en tu día, el día de las Madres que sois admirables, sois únicas, con esa ternura, con esa dulzura, y para ti, ese recuerdo eterno, hacía esa inmensidad, que es tu magia que me transmites, querida Mamá, eres la mejor, fuiste la más admirable, y eres mi caminar, gracias, Mamá, besos a ese cielo, tu cielo...Feliz día de la madre para todos amigos, para las que las tenéis a vuestro lado, y las que no están, a las que las llevamos en el corazón eternamente.
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