Quince años sin ella, echando de menos el café de la tarde en esos domingos de unas largas tardes de sol, su alegría, la sonrisa, la simpatía, nuestras confidencias, anécdotas compartidas, su vida, la peluquería, dónde estuvo trabajando tantísimos años, el recuerdo al gran amor de su caminar, no tuvo hijos, los sobrinos, los hermanos, sus amigos, cuando se quedó muy jóven viuda, otros amores, el comienzo de nuestra amistad, durante catorce años, con esa vitalidad, con ese saber estar, admirándonos, diciendo, fueron esos momentos, la sensibilidad, las lágrimas de emoción en momentos compartidos, quince años con esa ausencia, con ese aroma que nos dejo, en la misma esencia, era tan maravillosa, tan genial, siempre con la compañía de su perrita Chita, el sendero de su felicidad, me quedó el sabor de su añoranza, de su nostalgia, de alguien, de Teresa, esa persona que conocí, a mis diecinueve, en esa reunión, y hoy es mi luz, es mi protección, junto a ellos, me quedo con su sonrisa siempre...Feliz domingo, de relax, amigos, el recuerdo de esos seres queridos que un día nos dejaron, y están en nuestra alma.
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