OBSERVANDO ESE HORIZONTE...

Observando ese horizonte, ella de la mano de él, admirando el uno al otro, esa esencia de un sentimiento profundo, que va más allá, que no hay motivo, que no hay una sensibilidad sin ese beso, que surge, que calma esa sed de ternura, de melodía, de esas miradas enamoradas, que alteran la filosofía de lo que fue y ya es, porque es el pensamiento que deambulea por las llaves de un destino, y marca retos de inspiración y abre esas ventanas a la libertad, a los horizontes que se observan, porque el amor resuena en los corazones, de esas dos almas enamoradas, que un día se vieron, surgió el flechazo y amaneció la maravilla, el reencuentro y el momento...Que este nuevo sábado sea para recordar, para sentir.