Agosto,
de nuevo entre nosotros un año más, acompañado de la calor, la crisis, los
caminos de piedras y el querer pensar en positivo aunque cueste, porque esta
todo que se nos va de las manos, en realidad a nosotros no, al Gobierno que nos
vuelve locos a cada uno. Pero hablando de mi misma y de mis proyectos, me
siento muy satisfecha conmigo porque uno de mis sueños se hizo realidad en
junio, con la representación de mi obra en el pueblo, yo como autora teatral,
el sólo motivo de ver unos personajes que has creado sobre un escenario, eso ya
es motivo para sentirse una realizada y yo verdaderamente me siento, queda en
mí una cosa para realizar para sentirme ya totalmente feliz y contenta, una
deuda pendiente, un perdón que todavía no ha llegado, y hace que no me sienta
bien del todo, porque he perdido al hombre de mi vida, por esa inseguridad, ese
miedo, y ni tan siquiera yo misma entiendo el porqué, ahora con el suceder de
los días, me doy cuenta lo importante que es en mi existencia, cuando le vi
hace unos días pasar por la puerta de mi casa, me sentí impotente una vez más
por no poderle decir, y gritarle para dialogar con él, no iba solo, tampoco era
el momento, y le pido de todo corazón al destino, al Ángel de la Guarda, y al
Dios, que exista un día dónde podamos hablar, y así pueda enfrentarme conmigo
misma, yo no sé lo que sucederá después, pero deseo acostarme con la conciencia
tranquila, además tengo la sensación que este mes de agosto, recién iniciado va
ha ser uno de los meses mejores de mi vida, agosto ya estas aquí, queremos que
seas especial, bienvenido.
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